César Acuña, Gobernador de la región La Libertad, ha solicitado al gobierno de Dina Boluarte que declare el ‘estado de sitio’ en Trujillo debido al reciente ataque con explosivos en la avenida Perú, que dejó 3 heridos y más de 20 viviendas afectadas. Acuña calificó el acto como «terrorista» y urgió la aplicación del artículo 137 de la Constitución Política del Perú para prevenir futuros ataques. Además, pidió al Congreso aprobar la Ley de Terrorismo Urbano para combatir la creciente ola de violencia en la región.

Acuña busca de esta manera, la salida más fácil ante los imparables actos delincuenciales que mantienen a Trujillo en zozobra y la convierten en una de las ciudades más peligrosas del Perú. El Gobernador liberteño es cuestionado por la población, por su ineficacia para combatir la inseguridad en Trujillo. La creciente ola de violencia y delincuencia en Trujillo ha generado un profundo descontento hacia la gestión de César Acuña, quien parece incapaz de tomar medidas efectivas para proteger a la ciudadanía. Los trujillanos exigen resultados y soluciones concretas para frenar la inseguridad que azota a la ciudad.

La Libertad es la segunda región con mayor cantidad de víctimas de homicidio a nivel nacional, con cerca de 200 asesinatos en lo que va del año 2025. Sin embargo, para Martín Namay, gerente general del Gobierno Regional de La Libertad, César Acuña “ya cumplió” con su deber en la lucha contra el crimen. Según Namay, no es responsabilidad del gobernador y líder de Alianza Para el Progreso (APP ), César Acuña, enfrentar el crimen, y que su rol se cumplió una vez que entregó camionetas a la Policía Nacional para que sean los agentes quienes enfrenten la ola de crimen e inseguridad que azota a su región.

¿Podrá Acuña revertir su imagen de ineficacia y demostrar su capacidad para liderar la lucha contra la delincuencia? La población trujillana desaprueba enormemente su gestión.